Dr Pedro Marcano.

(Querido Diario:

No sé porqué te llamo "diario" si muchas veces paso semanas sin escribir.)



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La razón más reciente del descuido a mi blog fue que estuve ayudando a dar salud a un paciente muy especial para mí. La foto que ven es del Dr. Pedro Marcano Verde, quién fuera parte del equipo de mis pediatras durante mi estancia en el Hospital de Niños J. M. de Los Ríos. Trabajó por 36 años en este hospital, cumplió hace poco 50 años de egresado de la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela, cuando sólo existía una escuela.

Desde entonces mantuvimos contacto, si se quiere indirecto, porque una de mis tías es muy cercana a él y a su familia, y siempre estábamos recibiendo noticias mutuas siempre pendientes y actualizados, él de mí y viceversa. En diciembre mi tía me contó que los resultados de unos exámenes no habían sido muy alentadores y el doctor Pedro se encontraba aquejado de salud, por lo cual fue operado el marzo y en mayo, y además se le unió un cuadro de Miastenia Gravis que hizo empeorar las cosas de una forma determinante.

Luego de esto ingresó a terapia intensiva donde estuvo 45 días y finalmente regresó a su casa con una condición delicada pero con muchas espectativas de mejoría.



Fue entonces cuando Josefina, su esposa me llamó, y vine a verlo y formar parte de el equipo de salud que lo estaba atendiendo. De inmediato se acordó de mí y me dijo que había engordado (cosa que evidenciaba su total estado de conciencia. je je je), pude ver un traqueostosmo a través del cual respiraba, un Bi-pap de apoyo ventilatorio y un gastrostosmo para sustituir la vía oral.
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Supe de la Fundación Dr. Pedro Marcano Verde, que fue creada por la esposa e hijos del Dr. Marcano con el fin de recolectar donativos y cualquier tipo de ayuda para sobrellevar la enfermedad que padece el Dr., además de servir de apoyo a todas aquellas personas y familiares de pacientes que sufran la Miastenia Gravis.


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Varios días estuve practicamente internada en su casa, y estos me sirvieron para renovar lazos con él, con su esposa, hijos, etc. Su voz no era audible a causa del traqueostosmo, pero con el movimiento de sus labios la conversación era entendible casi en totalidad, de esa manera llegamos a hablar acerca de la evolución que tuvo de la miastenia, de múltiples temas de medicina, de nuestras carreras, de experiencias de sus pacientes y los míos, y de su enorme voluntad de salir de esa cama y lograr otra vez un estilo de vida óptimo.

Pero la vida no lo quiso así, tuvo que regresar a terapia intensiva, y fue el jueves 13 de septiembre, cuando a las 2 :20 pm entró en shock, del cuál no pudo ser rescatado.



Estuve presente ese día, me permitieron darle las atenciones necesarias, higiene y confort, cambios de posición... conversamos un poco porque estaba preocupado por su familia, y pude entender claramente en sus labios cuando dijo: "Por favor, ayuda mucho a Fina.Cuídala, ayúdala mucho". Esa fue nuestra última conversación. A partir de ahí comenzó a quejarse de incomodidad, lo que intentamos resolver con un poco de ejercicios, también me pidió que lo afeitara...



Estaba en mis brazos, ví sus ojos cuando dieron su último brillo, sus signos vitales descendieron y sus párpados se fueron cerrando como hacia un sueño. El monitor hizo escándalo, todos corrieron hacia nosotros: ambú, compresiones, atropina, adrenalina, electro shock... durante 35 minutos...

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Pedro, me enseñaste un montón de cosas en tan pocos días. No logro recordar el sonido de tu voz, pero pude leer tus labios cientos de veces, ver tus gestos, y entender tantas cosas que tenías para decir. No sé porqué Dios nos unió en una circunstancia tan particular... lo cierto es que dejaste en mí una sed de seguir a tu lado,de aprender más de ti, de compartir, de darte cariño... y eso lo tengo guardado y es para ti. Me enseñaste que hay relaciones que duran toda una vida y te aportan muy poco, pero también existen las relaciones intensas que en sólo días o quizás horas, te aportan toda una vida de experiencias. "Por eso, Pedro, al que dices que te vas de mi lado, guía de mis pasos, luz de mi camino, quiero decirte que, al igual que el sol no se apaga y el río no muere, tu alma siempre vivirá. Yo sé que no te marchas, que te quedas a mi lado más que antes, y sé que no me quedo, porque mucho de mí se va contigo. VIVIRÁS EN MÍ: POR SIEMPRE"